NUESTRA HISTORIA
Nuestra historia empieza con el fallecimiento del marido de Joan Hunt, fundadora de Cudeca, que en aquel momento es sólo "una señora inglesa jubilada residente en la Costa del Sol". Cuando Fred cae gravemente enfermo de cáncer, los cuidados paliativos en España aún se encuentran en una etapa incipiente. Joan ve como su marido sufre por no recibir una atención médica especializada hasta su llegada a la unidad de cuidados paliativos de la Cruz Roja en la que la joven doctora Marisa Martín, hoy en día Gerente de Fundación Cudeca, se hace cargo de él hasta su fallecimiento.
Después del fallecimiento de Fred, Joan sacó fuerzas y con 65 años, sin hablar el idioma y con pocos recursos, puso en marcha la Fundación Cudeca, con la vocación de ayudar a los demás hasta el final de sus días.
TU MANERA DE
puede cambiar vidas
TESTIMONIOS FUNDACION CUDECA
No tengo palabras para agradecer la labor humanitaria que tiene este equipo, que escasamente 12 h con ellos facilitaron que mi padre pudiera irse en paz y tranquilo, así como para nosotras trasladarnos ese conicimiento que desconocemos totalmente en esta última fase de la vida, y que nos ayuda a entender situaciones.
No puedo estar más agradecida con la increíble labor de todo el equipo, sobre todo del equipo médico que ha estado a nuestro lado en todo momento hasta el final. Lo principal es tener claro la situación ante la que estamos y saber que ellos son un apoyo y no un servicio de emergencias. Me pude organizar super bien con ellos para saber como tener que actuar en cada momento, nos han aportado el material necesario para hacer de sus últimos días una estancia más amena, han estado para apoyarnos, guiarnos y explicarnos todo lo que necesitábamos saber en cada momento y han sido un rayito de luz en tanta oscuridad.
Luis, Noemi y Victor, estoy segura que mi abuela Maria Jesús os lo agradece desde donde quiera que esté.
Mi hermano ha fallecido hoy en Cudeca Benalmadena.
En todo momento nos hemos sentido perfectamente atendidos y comprendidos. Nos habeis ayudado muchísimo a pasar estos momentos tan duros.
Siento un profundo agradecimiento hacia todos los profesionales que nos han atendido, muy especialmente por la doctora Gloria Mateo, nos ha cuidado con gran humanidad y profesionalidad.